Por: Pamela Cuevas, Coach Organizacional.
¿Habías escuchado el término “comunicación no violenta?, si estás en el ramo de la Psicología o afín a ésta, tal vez ya estés familiarizado con este término, también es nombrada por sus siglas CNV, o comunicación compasiva; hoy deseo compartirte cómo puede aportarnos ventajas en nuestra forma de relacionarnos con nuestro entorno y con nosotros mismos.
Es un modelo desarrollado por Marshall Rosenberg, su objetivo es que nuestra comunicación sea con empatía, expresando con claridad observaciones, sentimientos, deseos, metas, peticiones, sin evaluar, etiquetar o definir de manera personal.
Por lo regular, cada acción se origina con el fin de satisfacer necesidades, por lo que es preferible canalizar en forma sana y compasiva sin hacer uso de la culpa, la vergüenza, la acusación, la coerción o las amenazas, esto es, satisfacerlas sin que sea a costa de frustrar las necesidades de otra persona.
Un concepto claro es no utilizar juicios (calificación personal) sobre lo que está bien o está mal, o sobre lo correcto e incorrecto, siendo consciente de que éste es de acuerdo a cada ser y su mirada. Cuando somos conscientes del uso de nuestras palabras, de nuestro lenguaje, es decir, del hablar y escuchar, es posible conectar con nosotros mismos y con otras personas de manera que emerja nuestra compasión natural.
La compasión del ser se expresa cuando de modo natural renuncia a la violencia.
¿Cómo utilizar la CNV y reestructurar nuestra forma de percibir, comprender y comunicarnos con nosotros mismos y con los demás aún en la adversidad que se nos presenta?, aquí te presento 8 puntos para comenzar a practicar:
1.- En lugar de obedecer a reacciones habituales automáticas, convierte tu lenguaje, interno y externo en respuestas conscientes y realistas entre lo que sientes y lo que realmente deseas.
2.- Ten en cuenta cada vez que expreses tus necesidades, las de los demás. Detecta sentimientos y actitudes propios y ajenos.
3.- Reduce al mínimo las reacciones de resistencia, defensa y violencia, cuando te centras en clarificar lo que observas, sientes y quieres, en lugar de diagnosticar y juzgar, surgirá en ti de forma natural la compasión.
4.- Observa y escucha sin juicio, sin suposiciones, sólo observa lo que es y de ahí evalúa la situación.
5.- Cuestiona la emoción que se aloja en tu ser, cómo te sientes a partir de lo que observas y cómo transformar a partir de ello lo deseado (como la hierba que rompe el suelo para vivir, no para destrozarlo).
6.- Encuentra el momento para conversar, expresarte asertivamente con tu entorno.
7.- Haz /te una petición dirigida a conseguir la meta o el deseo (necesidad) genuino.
8.- Recuerda que comunicación es lo que el otro entendió, es la respuesta que obtienes, a partir de este concepto relaciónate con los demás, no es sólo tu realidad, debiera ser una realidad compartida, escucha más allá de las palabras.
Practicar la CNV nos conecta con nosotros mismos y con los demás, nos recuerda lo que todo ser tiene en su interior, la compasión.
México hoy más que nunca lo requiere, porque… #Sentir- NoEsElección
“ENOJARSE ES FÁCIL. ENFADARSE CON LA PERSONA ADECUADA, EN EL GRADO EXACTO, EN EL MOMENTO OPORTUNO, CON EL PROPÓSITO JUSTO Y DEL MODO CORRECTO; ESO SÍ QUE ES DIFÍCIL”.
-ARISTÓTELES
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