El Reino Unido está consternado por la muerte de la reina Isabel II y se espera que el período de luto hasta funeral sea extenso y cargado de simbolismos.

Así es como lo estuvo planeando el palacio de Buckingham durante décadas, con la intervención de los sucesivos gobiernos, el parlamento, las Fuerzas Armadas y la propia monarca.

El resultado de los preparativos quedó plasmado en un documento con el nombre clave de ‘Operación London Bridge‘ y detalla cada paso a seguir para los próximos diez días.

Día D 1: la proclamación del nuevo rey

A las 10 de la mañana del día después de la muerte de la reina, el Consejo de Adhesión , que incluye a importantes figuras del gobierno, se reunirá en el Palacio de St. James para proclamar al rey Carlos como nuevo soberano.

El nuevo rey será proclamado desde un balcón del palacio y desde la Royal Exchange, la antigua Bolsa de Comercio de Londres. Después, el Parlamento se reunirá para emitir un mensaje de pésame y suspenderá sus sesiones durante diez días.

Siguiendo la tradición, la sesión empezará con un discurso del primer ministro y después todos los parlamentarios jurarán lealtad al nuevo rey, aunque algunos republicanos cruzarán sus dedos al hacer un juramento de 500 años de antigüedad.

A las 3:30 de la tarde, el primer ministro y el gabinete tendrán una audiencia con el nuevo rey, quien a las 6 pronunciaría su primer mensaje a la población a través de radio, TV, YouTube y redes sociales.

Día D 2: el Operativo Unicorn

El ataúd con los restos de la reina será trasladado al Palacio de Buckingham, en el centro de Londres, en un operativo que los organizadores denominaron Unicorn. El primer ministro y los ministros asistirán a una recepción para dar la bienvenida al féretro.

Este mismo día, las proclamas sobre la muerte de la reina y la proclamación del nuevo rey se leerán en distintos puntos del Reino Unido, como la ciudad escocesa de Edimburgo. Es probable que continúen los homenajes en el parlamento.

Día D 3: el rey Carlos se presenta a sus súbditos

El rey Carlos y su esposa, la reina Camillase embarcarán en una gira de presentación por el Reino Unido, comenzando con una visita al parlamento escocés y un servicio religioso en la Catedral de St. Giles en Edimburgo.

En Irlanda del Norte, recibirá un homenaje en el castillo de Hillsborough y asistirá a un servicio en la catedral de Santa Ana en Belfast. Posteriormente visitará el Parlamento galés y asistirá a un servicio en la catedral de Liandaff, en Cardiff.

Día D 5: la primera procesión fúnebre

Una gran procesión militar, ensayada el día anterior bajo el nombre de Operativo Lionescoltará los restos de la reina Isabel desde el Palacio de Buckingham hasta el Palacio de Westminster. En el Hall del Parlamento, el féretro será colocado sobre un catafalco y el arzobispo de Carterbury pronunciará oraciones en presencia de la familia real.

Día D6 a D9: Operativo Feather

El féretro de la reina, cubierto por el Estandarte Real y la Corona Imperial del Estado, permanecerá en el Westminster Hall durante tres días, en una operación cuyo nombre en código es Feather.

La capilla ardiente estará abierta al público y a invitados VIP durante 23 horas al día y se espera que se lleve a cabo allí una ceremonia similar a la ocurrida en 1936, al morir el rey Jorge V, cuando sus cuatro hijos varones montaron guardia nocturna junto al ataúd. Se le llamó “La Vigilia de los Príncipes”.

Día D 10: Funeral en Londres, entierro en Windsor

Habrá dos minutos de silencio en todo el Reino Unido al mediodía antes del inicio del Funeral de Estado, que se celebrará en la Abadía de Westminster en presencia de jefes de Estado y monarcas reinantes de todo el mundo.

Los funerales de Estado están reservados a los monarcas británicos, aunque puede acordarse su celebración ante la pérdida de una figura excepcional, un honor compartieron el científico Isaac Newton, el almirante Nelson y Winston Churchill.

Tras una procesión militar en Londres y el centro de Windsor, el cuerpo de la reina será depositado en la Capilla Conmemorativa del Rey Jorge VI, ubicada en la capilla de San Jorge, donde también reposan los restos de sus padres, de su hermana Margarita y su esposo, el príncipe Felipe.

Fuente: Darío Silva D’Andrea