Nacho Palau ha roto su silencio y ha hablado, por primera vez, de su relación con Miguel Bosé. Una historia que él mismo tilda de “terrorífica”, al menos en su tramo final.
Por eso, Nacho inició un proceso judicial del que ahora habla. “Era un proyecto de familia en común. Eso el juez lo ha dado por probado. Lo que ocurre es que nuestro sistema jurídico no permite esa filiación. Sí hay una filiación de hecho, pero no se puede declarar una filiación de derecho”, dice Nacho, que confiesa que agotará la vía judicial para conseguir que los cuatro hermanos vivan juntos y que no solo compartan vacaciones.
Palau recuerda el momento que decidieron ser padres, algo que lo cambió para siempre. “Miguel se empezó a obsesionar con la seguridad de los niños y esa obsesión fue haciéndose más grande. Imponía su criterio siempre, y cada vez lo hacía más. Eso y otras cosas minaron la relación”, relata, asegurando que al cantante, “cuando nacieron los niños, se le empezó a agriar el carácter”.
“Miguel se empezó a obsesionar con la seguridad de los niños y esa obsesión fue haciéndose más grande. Imponía su criterio siempre, y cada vez lo hacía más”
Sobre sus últimos años de relación, que dice que “acabó como una historia de terror”, confirma que vivieron en Panamá, donde se trasladó la familia en 2014. “Era tremendo, nos llevábamos fatal. Yo me fui fatal de esa relación. Su comportamiento, su carácter y forma de ser, todo era tremendo. Miguel cuando es bueno es muy bueno, y cuando es malo es el peor“, asegura Nacho.
De su opinión sobre el pregonado negacionismo del artista, dice: “Yo estoy vacunado y vacunaré a mis hijos. No sé qué hará Miguel con Diego y Tadeo”.
FUENTE: 20minutos.es